Perspectiva histórica II: La España desde el XIX

“Perspectiva histórica II: La España desde el XIX” pretende enfocar la mirada desde el punto de vista cronológico hacia un repertorio histórico, que se ha asociado al movimiento bandístico español desde la creación de las primeras bandas militares, municipales y civiles en este país desde finales del siglo XIX. Además de su natural divulgación internacional, la calidad compositiva de esta música la ha hecho permanecer perennemente en las salas de conciertos hasta nuestros días.

Con una selección de 4 compositores españoles nacidos en el siglo XIX, el programa se configura cronológicamente con obras que muestran una evolución estilística de nuestro repertorio sinfónico, bajo el hilo conductor de la música folclórica española, que actúa como elemento de inequívoca conexión conceptual y que ha sido un exitoso nexo con nuestro público durante todos los tiempos.

Francisco Asenjo Barbieri: SINFONÍA SOBRE MOTIVOS DE ZARZUELAS En 1856, por el aniversario de la reina Isabel II, se inaugura el Teatro de la Zarzuela de Madrid. Para la ocasión, se encarga al maestro Francisco Asenjo Barbieri una composición musical, para ser interpretada conjuntamente por una doble formación: la “Orquesta Sinfónica del Teatro de la Zarzuela” y la “Banda del Regimiento de Infantería del Príncipe nº 3”.

El maestro Barbieri escribe una obra con estructura de fantasía o rapsodia, al estilo de una obertura italiana (rápido-lento-rápido), incorporando fragmentos de las zarzuelas más famosas de aquellos años, tales como “El duende” (Rafael Hernando), “La espada de Bernardo” (Barbieri), “Buenas noches Don Simón” (Cristóbal Oudrid), “El dominó azul” (Emilio Arrieta), “Jugar con fuego” (Barbieri), “El grumete” (Emilio Arrieta), “El valle de Andorra” (Gaztámbide) e “El amanecer” (Gaztámbide).

Salvador Giner: EL FESTÍN DE BALTASAR

Se trata de un poema sinfónico de carácter romántico y pragmático basado en el Libro de Daniel del Antiguo Testamento. La música describe el banquete que el rey Baltasar ofrece a sus cortesanos; unas palabras enigmáticas son escritas en la pared por una mano misteriosa, que leídas por Daniel, interpretan el significado de la caída del imperio caldeo en manos de los persas.

La obra del maestro valenciano Giner, dedicada al maestro Luis Mancinelli, se estrena en su versión para orquesta por la Sociedad de Conciertos de Valencia en el Teatro Pizarro el 20 de julio de 1893.

Ricardo Villa: GRAN FANTASÍA ESPAÑOLA

Ricardo Villa fue un conocido violinista y compositor. Además de convertirse en Concertino del Teatro Real, destaca su conexión con el mundo de la banda por ser director de la Banda Municipal de Madrid desde su fundación en 1909 hasta su muerte.

La Gran Fantasía Española es una de sus obras más populares, que se ha hecho famosa sobre todo por su versión (más corta) para banda; la partitura original es un concierto para piano y orquesta. La versión de este programa se trata de la transcripción para banda del formato original de piano solista y orquesta. Puede considerarse una de las obras representativas del nacionalismo español de principio del siglo XX.

La composición contiene los guiños más típicos del folklore español, incluyendo las siguientes danzas: polo (canto andaluz), seguidilla (danza de origen manchego del s.XV), muñeira (danza gallega cantada) y zapateado (danza andaluza “zapateada” muy rápida).

Joaquín Turina: SINFONÍA SEVILLANA

El andaluz Joaquín Turina ya establecido en Madrid después de la etapa de formación parisina, demuestra con la Sinfonía Sevillana su compromiso con la composición en el ámbito del folclore andaluz, y por lo tanto, el abandono de la influencia francesa.

1.-Panorama: “Forma de sonata. La parte poemática supone simplemente un idilio entre una madrileña y un sevillano, que se desarrolla a través de la obra, sin estorbar a la construcción musical. Introducción con ambiente panorámico; el primer tema representa al andalus y el segundo a la madrileña”.

2.-Por el río Guadalquivir: “Introducción poética de ambiente: el idilio se formaliza en un barco de vapor, desde Sevilla hasta San Juan de Aznalfarache. En cinco secciones, una romántica serenata se interrumpe un par de veces; la primera por unas melodías juguetonas de coqueteo, y la segunda por una danza folclórica”.

3.-Fiesta en San Juan de Aznalfarache: “La fiesta se celebra en una venta, en la orilla del río. Los bailes y las canciones valen de marco para el idilio, que se exalta por momentos. `Fantasía poemática en 3 partes: 1ª parte “Introducción y sevillanas”; 2ª parte “Garrotín-Farruca-Garrotín-Farruca”; 3ª parte regresa el “Tanguillo”, deprimido esta vez”.